EL PODER DE LOS RECUERDOS
Blanca de la Torre, 8-2-2023
En 1987 el científico japonés Susumu Tonegawa recibió el Premio Nobel de medicina, al demostrar a través de un experimento con ratones que sufrían depresión inducida por estrés, que estos podían curarse estimulando las células del cerebro donde se almacenan los recuerdos positivos. La reactivación de estos recuerdos contrarrestaba el impacto que habían sufrido por las experiencias adversas, hasta el punto de superar la depresión.
Los recuerdos de las experiencias vividas significativas (memoria episódica) se almacenan en el hipocampo; esta información se procesa en la amígdala, integrando las emociones asociadas a dicha información y dando lugar a las respuestas fisiológicas y motoras correspondientes. Ambas estructuras forman parte del sistema límbico, que es el principal responsable de la vida afectiva de las personas.
Con este experimento se demostró que se podían cambiar las asociaciones que unen la memoria contextual o episódica con su correspondiente reacción emocional y se abrieron nuevas líneas de investigación para el desarrollo de tratamientos para los trastornos del estado de ánimo.
La capacidad de representar en la mente recuerdos o situaciones desagradables e incluso temidas, hace que la amígdala lo detecte y lo procese como una amenaza, desencadenando una respuesta fisiológica de estrés que libera entre otras hormonas el cortisol; así, no siendo necesario que suceda nada malo, sino simplemente imaginándolo, el cuerpo reacciona como si fuese un suceso real.
De la misma manera se ha demostrado que revivir una experiencia positiva a través de un recuerdo, segrega en el organismo la misma o incluso mayor cantidad de sustancias neuroquímicas relacionadas con el bienestar como la serotonina, la dopamina o la oxitocina, que cuando se experimentó por primera vez en vivo y en directo.
Por lo que no es de extrañar que uno de nuestros pasatiempos favoritos en reuniones con seres queridos sea recordar anécdotas, que una vieja foto desencadene un aluvión de recuerdos y sensaciones agradables, transformando el estado de ánimo de un modo tan impactante, y que muchos tratamientos para la depresión se centren en la recuperación de recuerdos asociados a vivencias positivas.
Evocar un recuerdo positivo también puede ayudar a regular un estado de activación elevado y funcionar como recurso. En este sentido puede ser un buen refugio donde permanecer unos minutos cuando se necesita. Recordarse a uno mismo habiendo superado una situación difícil puede infundir sensación de control en presencia de niveles muy elevados de estrés.
A mayor especificidad de los recuerdos, mayor será el impacto en el organismo. Nos interesan aquellos que contienen imágenes, información sensorial y emociones, habiéndose podido comprobar en diferentes estudios que las personas deprimidas tienen mayor dificultad para recuperar este tipo de recuerdos porque tienden a la sobregeneralización, es decir, a recordar de forma más general los acontecimientos importantes de sus vidas.
Por ello las terapias basadas en recuperar estos recuerdos, arrojan tan buenos resultados, al ayudar a estos pacientes a recordar de forma detallada sus vivencias positivas es más fácil que se conecten emocionalmente a ellas.
Por último, podemos construir un buen almacén de recuerdos positivos desde cualquier etapa de la vida si sabemos reconducir el foco atencional hacia donde nos interesa. Es ahí donde fijamos lo que permanece en nuestra memoria, por lo que entrenarse a través de atención plena en sensaciones, pensamientos o imágenes positivas mientras experimentamos, no solo aumenta la capacidad para disfrutar del momento presente sino que favorece la retención de la información que se conecta con sentimientos positivos.
¿Sabías que...
… muchos de los recuerdos que aumentan la sensación de bienestar tienen que ver con experiencias de conexión, y es que la oxitocina está directamente involucrada en la codificación de recuerdos sociales positivos.
Para conocer más...
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Marian Rojas Estapé. Cómo hacer que te pasen cosas buenas. Editorial Espasa