La doctora e investigadora en psicología Elaine Aron, comenzó hace más de tres décadas a estudiar el rasgo “alta sensibilidad”, el cual se estima que afecta a entre un 15/20% de la población mundial. Este estudio se basó en su práctica clínica y en trabajos de figuras reconocidas en el mundo de la personalidad como Carl Jung.
El sentido común y la experiencia social en relación con los demás nos dice que hay personas que son más sensibles a estímulos externos, los captados a través de los sentidos, e internos como las emociones o las sensaciones fisiológicas. Más allá del sentido común, ya en el ámbito científico la dificultad para distinguir a personas que son altamente sensibles de las que no lo son con el fin de realizar estudios válidos que revelen posibles diferencias neurológicas es grande. Se debe a que ninguno de los instrumentos que intentan medir de forma específica este rasgo posee las propiedades psicométricas que han de tener las pruebas con las que se categorizan los rasgos estables de la personalidad.
Aun así, muchos profesionales de la salud mental y de la neuropsicología han seguido investigando sobre este tema, encontrando no sólo patrones similares de respuesta, sino indicios a nivel neurocientífico de que pueden existir determinadas áreas cerebrales que se activan en mayor o menor medida en función de este rasgo de la personalidad, aunque aún queda mucho por estudiar y categorizar.
No sé, pero yo no veo tanta gente, un 20% casi, como muy sensible a los estímulos auditivos, luminosos, etc.
Todo lo que aprendo en el blog, que es mucho, lo llevo a mi pasión, que es navegar. Y tengo que reconocer que es utilísimo, quizá lo más importante, a la altura de cualquier técnica de navegación. Porque la base es el navegante, y la psicología se aplica al él.
❤️
Pues yo no debo tener nada de PAS, dicen que no me entero de la mitad de las cosas...
Muy de acuerdo con Javier, es fácil autoreconocerse a una misma como PAS