PRUEBAS EN RATONES MUESTRAN QUE LA HEVINA REVIERTE EL ENVEJECIMIENTO CEREBRAL

La hevina, también conocida como SPARCL1, es una glicoproteína secretada naturalmente por los astrocitos, células gliales que desempeñan funciones irreemplazables en el sistema nervioso central. Esta molécula facilita la plasticidad sináptica, agilizando la formación y mantenimiento de conexiones entre neuronas.

Un estudio reciente realizado por los investigadores brasileños Felipe Cabral-Miranda, Ana Paula Bergamo Araujo y Flávia Carvalho Alcantara Gomes, del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Universidad Federal de Río de Janeiro, y Danilo Bilches Medinas, del Departamento de Bioquímica del Instituto de Química de la Universidad de Sao Paulo, publicado el pasado febrero en la revista Agig Cell, pone de manifiesto que la hevina puede desempeñar un papel decisivo en la mitigación del deterioro cognitivo. 

La demencia se caracteriza por una pérdida significativa de la capacidad cognitiva que dificulta el funcionamiento diario, con una incidencia cada vez mayor en la población anciana, lo que plantea un importante reto sanitario mundial. Afecta a unos 55 millones de personas en todo el mundo, y se prevé que esta cifra aumente a 152 millones en 2050, con un impacto más acusado en los países de ingresos bajos y medios. Esta enfermedad supone una carga considerable para las personas, las familias y la economía, con unos costes mundiales estimados de aproximadamente 1 billón de dólares anuales. La enfermedad de Alzheimer (EA), la demencia más prevalente en todo el mundo, se caracteriza por pérdida neuronal y sináptica, asociada al deterioro cognitivo, junto con la acumulación de placas beta-amiloides.

Los investigadores desarrollaron un estudio en ratones de avanzada edad. Utilizando vectores virales recombinantes, lograron sobreexpresar hevina en los astrocitos del hipocampo, una región cerebral clave para la memoria.

Los resultados mostraron una mejora significativa en las pruebas de memoria y aprendizaje en los animales tratados. Además, se pudo comprobar un aumento en la densidad y calidad de las sinapsis neuronales, lo que implica una restauración de la conectividad cerebral.

Uno de los aspectos más sorprendentes del estudio fue que la mejora cognitiva se logró sin una reducción en las placas beta-amiloides, depósitos proteicos tradicionalmente asociados con el Alzheimer. Esto sugiere que el deterioro cognitivo podría estar más relacionado con la pérdida de sinapsis que con la acumulación de estas placas, al revés de lo que tradicionalmente se venía pensando.

Este descubrimiento plantea la posibilidad de desarrollar tratamientos que se centren en la restauración de las conexiones neuronales, en lugar de eliminar las placas amiloides. La hevina emerge así como un objetivo terapéutico prometedor para combatir el deterioro cognitivo asociado al envejecimiento y las demencias.

Los efectos de la sobreexposición de hevina en ratones se pueden describir así:

Una mejora significativa de la función cognitiva; un aumento notable de la densidad sináptica; sin cambios significativos en los niveles de placas beta-amiloides y una modulación positiva de la expresión de proteínas sinápticas.

Aunque los resultados de la investigación son halagüeños, conviene destacar que por el momento sólo se han realizado en ratones. Serán necesarias numerosas investigaciones adicionales para determinar si los efectos observados se reproducen en humanos; así como para desarrollar métodos que permitan la administración segura y eficaz de terapias basadas en hevina. Así, los investigadores se proponen en futuros pasos iniciar estudios clínicos en humanos y analizar las posibilidades de desarrollar compuestos que puedan aumentar la expresión de hevina o imitar su función.

Finalmente, explorar la posibilidad de combinar terapias centradas en la utilización de hevina con otros enfoques multidisciplinares para abordar las demencias desde frentes variados.

Para leer el artículo completo: https://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/acel.14493

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