Los sesgos cognitivos han sido ampliamente estudiados desde los modelos de procesamiento de la información. El padre de la terapia cognitiva, donde se encuadran estos sesgos, es Aaron Temkin Beck, que descubre como los seres humanos simplificamos e interpretamos la realidad a la hora de tomar una decisión o dar significado a los acontecimientos que vivimos.
Estos atajos nos permiten categorizar y decidir de forma más rápida; y en este sentido se pueden considerar adaptativos, incluso aunque no recojan todos los datos para llevar a cabo un determinado análisis.
El problema sucede cuando se convierten en distorsiones de la realidad y funcionan como una trampa desde la que tomamos decisiones pudiéndonos llevar estas a malos resultados, sin que así lo deseemos.
Por ejemplo, si yo tiendo a simplificar la realidad yéndome a los extremos para hacerla más predecible, me pierdo algunos matices que pueden cambiar el significado de un comportamiento; o si interpreto lo que siento como una realidad objetiva, el mero hecho de sentirme ansioso o preocupado me llevará a pensar que existe un peligro o una amenaza real.
Resulta realmente útil la toma de conciencia de los principales sesgos o errores cognitivos que cometemos a la hora de percibir e interpretar la realidad, para poder ampliar la perspectiva cuando es necesario y corregir aquellos que nos están impidiendo funcionar de forma adecuada.
¿Quieres saber si tus sesgos te están influenciando en tu día a día? Haz el siguiente test y lo sabrás. Los resultados se enviaran vía e-mail personalizados una vez lo cumplimentes. Y recuerda que los resultados son orientativos, el estado emocional en el que te encuentres cuando rellenes el cuestionario puede influir en tus respuestas.
Cuestionario cerrado